miércoles, 20 de junio de 2012

Mochuelos en alta velocidad


Hola compañeros.

Después de algún tiempo sin publicar nada aquí os traigo unas imágenes de mochuelo en alta velocidad y una especie de making chapucero de cómo se hicieron las imágenes.


Tenía pensado hacer una foto de todo el montaje y una panorámica del lugar pero las prisas por no molestar a los pollos y a los padres fueron la tónica en todas y cada una de las sesiones.

Las imágenes fueron tomadas en tres sesiones diferentes en las que poco a poco y con los consejos de algunos compañeros se fue mejorando la iluminación y la fotografía general dejando la última sesión como la definitiva en la que pretendía sacar la foto deseada, cosa que no fue así, aunque solo faltó un poco de suerte. 

Trabajo previo.

El trabajo se realizó en una vieja construcción abandonada de las que abundan por las campiñas y secanos manchegos.
Hacía un año que localicé a una pareja asentada en la vieja casona y este año probé suerte por si seguían allí. Siempre los observaba desde la carretera pero esta vez me acercaría un poco más. Quería saber en cuál de esos agujeros de la vieja casa pondrían la puesta. Un hueco en la pared medio derruida parecía ser el lugar idóneo para que la pareja diera vida a sus congéneres.

Localizado el nido solo esperaba saber si este año la pareja criaría, cosa que tardé poco en averiguar porque en mi siguiente visita un huevo ya estaba dentro del cubil. La mitad del trabajo ya estaba hecho, así es que al día siguiente coloqué una caja negra y cuadrada de helado en el lugar donde iría mi cámara y unos palos a modo de trípodes donde irían los flash. Esto me sirvió para que el ave no desconfiase del montaje el día que le hiciese la primera sesión y se acostumbrara a salir del nido y ver todo el tinglado sabiendo que no correría peligro.

La incubación de los huevos dura aproximadamente 25 días así es que en ese tiempo decidí no acercarme por el lugar ya que estas aves pueden dejar de incubar si se les molesta. Tocaba tirar de paciencia y esperar.

Empieza lo bueno.

Un mes más tarde me puse manos a la obra y después de comprobar que la pareja había alumbrado a tres preciosos pollos que lucían su blanco plumón, decidí que era el momento de intentar fotografiar las entradas de los padres al nido con la técnica de alta velocidad.

Las sesiones empezaban a las nueve de la noche cuando ya la tarde empezaba a desvanecerse. Sobre las nueve y medía todo quedaba montado y me salía a la carretera donde dentro del coche esperaba los destellos de los flash. A las once de la noche y después de unas cinco o seis entradas de media, recogía el tinglado intentando molestar lo menos posible.

Los nervios de la primera noche cuando te ves solo dentro del coche, sin saber que pasará, esperando inquieto a que todo salga bien… es una experiencia que todo el mundo tendría que vivir. Cuando el primer destello de flash casi te cierra las pupilas y ves la silueta recortada del mochuelo en la luz, el subidón de adrenalina es increíble.

Material usado.

Cámara Nikon D300s
Objetivo angular TOKINA 12-24 mm.
Tres flash. Dos Nikon sb 25 y un Nikon sb 26.
Disparadores para los flash Yongnuo RF 603
Barrera IR Eltima.
Cables, trípodes, pinzas y demás soportes.

Esquema de trabajo.

La cámara con el angular, un flash frontal para el ave y la pared, otro cenital para alumbrar al ave por arriba y uno trasero para iluminar la pared y la espalda del mochuelo. La barrera secolocó de arriba a abajo usando el soporte para el flash cenital como soporte para el espejo reflector. El esquema es el siguiente.



Primera sesión.

La primera sesión, como es lógico, fue la más desastrosa de todas. La luz no estaba bien medida y el flash de contra que además iluminaba la pared del fondo, se calló al suelo y no hizo su trabajo.
La cámara estaba demasiado desplazada a la izquierda y  con el efecto angular daba la sensación de que la imagen estaba tomada casi detrás del ave.

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Aun así conseguí varias tomas que no me disgustaron del todo y que me sirvieron para mejorar en las siguientes sesiones.

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Segunda sesión.

Esta vez la iluminación no falló y la cámara se pegó algo más a la pared con el objetivo de dar menos protagonismo a la misma y mas al ave. Lo que sí que falló fue el protagonista que en esta segunda sesión hizo las entradas al nido por el lado equivocado, de frente a la cámara. Al estar más confiado entraba directamente al nido sin posarse en el posadero que había justo en frente de este.

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Nikon D300s. 24mm, V 200, F 7,1. ISO 200

Tercera sesión.

Como en el segundo intento el mochuelo me la había jugado y había entrado por el lugar equivocado, le coloqué una red para obligarlo a entrar en perpendicular a la cámara y así ocurrió. En esta última sesión las luces estaban ya más que medidas y con la red el mochuelo tenía que entrar por el lugar correcto, así es que mis esperanzas estaban puestas en captar una entrada en la que el ave llevara una buena ceba en el pico. No ocurrió así y aunque se hicieron varias fotos con cebas pequeñas, la foto que yo tenía en mente y que se parece mucho a la primera de este artículo, no está “redonda”. ¿Quedaría mejor con un ratón entre las garras verdad?

Nikon D300s. 24mm, V 250, F 13. ISO 400

Nikon D300s. 24mm, V 250, F 13. ISO 400

Nikon D300s. 24mm, V 250, F 13. ISO 400

Bueno no se puede pedir más a esta pareja la verdad. Se portaron de lujo y es una maravilla poder haberles hecho estas sesiones y robarles un pedacito de noche, la noche en la que ellos son los protagonistas en su viejo caserón abandonado.

Espero que os gusten.

Click en las imágenes para verlas a 1200 px



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viernes, 25 de mayo de 2012

Concurso fotográfico EUROPARC-España

Hola amigos.

Me compalce anuniaros que recientemente he sido galardonado con el tercer premio de la categoría AEFONA en el concurso de fotografia organizado por EUROPARC - España, organizado con motivo del Día Europeo de los Parques 2012, efemeride promovida por la Federación EUROPARC que conmemora la creación de los primeros parques en Europa.
 

















Sin duda una alegría para mi como participante y para la Federación por la gran acogida que ha tenido esta primera edición del concurso fotográfico.

La imagen presentada fué tomada en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel usando las técnicas comunes de fotografía nocturna en la que una larga exposición permitió recorrer el puente varias veces dando toques de flash en el sentido de la marcha y contra el suelo de la pasarela.

Espero que os guste.


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